Cambiante y sorprendente, la cocina de Baja California Norte se renueva y nutre de la sazón extranjera. Aquí los potajes predilectos son elaborados con pescados y mariscos frescos, pero, también, se ofrecen suculentas viandas que conjugan los secretos culinarios del mundo indígena con las técnicas y los ingredientes que los misioneros europeos trajeron a la península.
El sello gastronómico del estado lo ponen los frutos del Pacífico. En la ciudad de Rosarito, en Puerto Nuevo, comer langosta es una tradición desde los años 50, cuando los hombres de mar y sus esposas ofrecían este delicioso manjar a los turistas norteamericanos, el mismo que era acompañado con arroz, frijoles, una salsa picante única y enormes tortillas de harina.
La demanda es tan grande en la ciudad que, anualmente, se sirven cerca de 100,000 langostas y en octubre se celebra un festival en honor a este crustáceo. No debe dejar de probarlas. Le recomendamos hacerlo con una cerveza helada o una copa de vino blanco de los viñedos de Baja California.
Otra alternativa para los paladares con predilecciones marinas, son los tacos de pescados de ensenada, que se preparan con la tradicional tortilla de maíz y algo de salsa mexicana.
Además, en toda la zona de la frontera es popular el pan dulce mexicano de la ciudad de Tecate. Se preparan en hornos hechos con ladrillos y alimentados por leña, siguiendo técnicas y procedimientos antiguos, estos le dan un saborcito especial a los famosos panes.
La ruta gastronómica de Baja California Norte, ofrece la tradicional carne asada en Mexicali y los tacos de tiburón y camarón en San Felipe, antojitos tan populares como los cócteles de camarón y el cebiche.
En del panorama gastronómico actual, son notorias las innovaciones surgidas por la influencia foránea, las mismas que empezaron a gestarse en los años 20 del siglo pasado, cuando experimentados chef del "Viejo Continente" arribaron a Tijuana, para satisfacer las exigencias culinarias de los clientes de los casinos.
En este periodo el chef Livo Santini creó la famosa ensalada César, en el hotel del mismo nombre, propiedad de César Cardini. Todo ocurrió en una noche de 1940, cuando un grupo de aviadores pidió algo de cenar, justo en el momento en el que la cocina había cerrado.
Ante la insistencia de los huéspedes, Santini decidió preparar algo rápido para salir del apuro. Fue así que nació el famoso potaje, bautizado aquella noche como ensalada de aviadores.
En los últimos años del siglo XIX, Mexicali, la capital estatal, recibió a numerosos inmigrantes chinos que trajeron los secretos de su milenaria gastronomía, la cual se popularizó en la ciudad. En la actualidad existen más de 100 restaurantes de comida oriental.
La influencia francesa es notoria en el pequeño Puerto de Ensenada, donde se saborean guisos y postres de esa nacionalidad en el restaurante "El Rey Sol", fundado en 1947 para satisfacer el exigente paladar de la comunidad gala, residente en la zona de mineral de Santa Eulalia.
Muy cerca de ahí, en el Valle de Guadalupe, los viajeros probarán excelsas comidas acompañadas con panes y vinos, elaborados con las técnicas artesanales de los descendientes de las 60 familias rusas de la secta religiosa molokan o "bebedores de leche", llegados a estas tierras en 1905.
La sazón extranjera ha nutrido el recetario local. Cada platillo proveniente del exterior ha sido matizado con ingredientes propios, renaciendo como un nuevo manjar "bajacaliforniano".
Mención aparte merecen las bebidas, porque es sabido que la margarita, "la reina de los cócteles", nació en Ensenada, cuando la señora Margarita Orozco, a quien le encantaban los tragos con sal, le pidió a don David Negrete Covarrubias, conocido como "Deny", algo para tomar que satisficiera sus preferencias.
Con la intención de no defraudar a su clienta, Deny tomó la "martinera" o "vaso chequeador", exprimió una onza de
limón, media de tequila y tres cuartos de onza de contreau (licor de naranja).
La mezcla la sirvió en una copa champagnera, con el cuello humedecido con limón y escarchado con sal, formando un hermoso anillo blanco. Así se sirvió por primera vez el cóctel margarita. La bebida se haría popular durante la regata de New Port Beach, organizada en 1950.
Otro cóctel imperdible es el clamato, una mezcla especial de jugo de tomate y de almeja, creada en el bar El Acueducto del hotel Lucerna de Mexicali. Su nombre deriva de las palabras inglesas: "clam" (almeja) y "tomato" (tomate).
Comer y beber... una experiencia mágica en las ciudades de Baja California Norte. La mesa está servida. Usted es el invitado de honor.
Aquí podrás encontrar algunas recetas típicas del Estado de Baja California:
2.- Ensalada César
5.- Sopa de ostiones
6.- Tacos de pescado estilo Ensenada